Las vihuelas de arco, en sus variadas hechuras, tamaños y formas, fueron instrumentos abundantísimos en toda la Edad Media y Renacimiento. Aunque no se conserva ningún ejemplar original, gracias a la iconografía, podemos conocer algunas bellas vihuelas. En ocasiones, la representación es tan minuciosa y fidedigna, que constituye documento excepcional y se convierte en un buen punto de partida en el que inspirarnos.
Somos partidarios de respetar al máximo las fuentes iconográficas, que se complementan con otras informaciones extraídas de textos literarios, tratados teóricos, documentos históricos…
Al recibir un encargo, enviamos al intérprete un archivo de imágenes entre las que elegirá un modelo y en ese momento iniciamos un proceso que concluye con la modulación de las voces, procurando respetar el sonido de aquellos delicados instrumentos en toda su pureza.
Los violeros desarrollaron una ingente variedad de tipos de vihuelas de arco. Nos interesa este universo por su diversidad. Las incesantes búsquedas de los violeros, no dejan de suscitarnos reflexiones e interrogantes.
Hay dos grandes grupos de vihuelas de arco. Algunas, llamadas equivocadamente fídulas, eran tañidas en el hombro, las otras, verticalmente. Nos interesan ambas.